Mateo 1, 1-17 “Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo.”
Hay familias que llevan un archivo muy importante de su árbol genealógico y que se sienten muy orgullosos de tener la información de varias generaciones de su familia. ¿Has pensado alguna vez, hacer tu propio árbol? Recuerdo la película “Coco”, porque me gustó mucho la imagen que presentan sobre las personas de nuestra vida que han fallecido. Es tan importante que recordemos a nuestros ancestros, porque de ellos obtuvimos características que tal vez, nos definen hoy día. Que si tienes las manos grandes o los dedos largos, que si tu cabello es rizado o lacio, que si tus ojos son azules o negros; dicen que los nietos heredan mucho de los abuelos y la única manera de saberlo es si alguien nos platicó sobre los abuelos o bisabuelos que no llegamos a conocer.
Saber de dónde venimos es importante para algunas personas, a mí me gusta mucho saber cosas de la familia que no pude conocer, y cuando vivían mis abuelas me gustaba mucho que me platicaran sobre sus vidas, la de sus padres y sus hermanos. Así Jesús, que es el Hijo de Dios, también tenía su árbol genealógico como nos narra Mateo en su evangelio; es muy interesante. ¿Tú sabes qué tan lejos data tu apellido? O tal vez ¿has heredado algo que tiene muchos años pasando de generación en generación? Y ¿qué tal tu personalidad? Seguro alguna vez te han dicho “eres como tu Tía fulanita” o “como tu bisabuelo”, y es muy emocionante porque nos da una pauta para poder investigar sobre nuestra familia. He conocido personas que platican sobre sus abuelos como si los hubieran visto ayer, con tanto cariño, con orgullo y me dicen que jamás los conocieron. Es el recuerdo como en “Coco” que queda vivo después de la muerte; que se tiene ese amor y respeto hacia nuestra familia de generación en generación.
Vivamos con amor sabiendo que venimos de una familia que creo Dios para nosotros, así como nos envió a Su Hijo para enseñarnos el amor de la familia y los valores con que debemos vivir nuestra vida.
Propósito de hoy: Preguntemos a alguien de nuestra familia sobre los abuelos o bisabuelos y contemos su historia, para que estén siempre vivos en nuestro corazón.