Mateo 25, 1-13
“Estén pues, preparados, porque no saben ni el día ni la hora’’.
Prepararnos.
¡El amor!. Voy a insistir con esto del amor. Nos movemos por amor. Existimos por amor. Pensamos por amor. El eje de la vida se sostiene por amor. Y ese amor es tan grande como Dios mismo, porque viene de Él.
¿Has considerado por qué las emociones son así?, ¿Qué nos hace ser como somos?, ¿A veces lo piensas?. ¿Y qué te respondes?…¡Creo que todo es por causa del amor!. Es este sentimiento el que nos impulsa, el que nos motiva, el que nos hace actuar para bien o para mal. Amar, odiar, perdonar; sentir rencor, celos, alegrías, humildad, compasión. Fe. Todo es consecuencia del amor.
¿De qué manera vas a prepararte el día de hoy?. ¿Qué vas a hacer diferente de ayer?. Crees que puedes amar y perdonar un poco más, entrando a tu interior y valorando lo que llevas cargando, si es bueno o malo y si vale la pena que te deshagas de ese sentimiento, que pueda ir en contra de tus verdaderos principios morales.
Estar preparados, examinando nuestra vida, siendo personas de bien, con quien los demás quieran estar, siendo ejemplo para otros, viviendo según las reglas de vida, honrando a los demás y principalmente a nosotros mismos y a Dios.
Propósito de hoy: Ser consciente de mis acciones y prepararme.