Mateo 2, 13-18
Herodes mandó matar a todos los niños en Belén.
Hoy es el día de los Inocentes. Y quizá no sabemos porque. Porque Herodes mandó matar a todos los niños menores de dos años, “Los Santos Inocentes”. Herodes era un tipo prepotente, narcisista, egoísta, soberbio…un tipo sin escrúpulos. Cuando las cosas no le salen como él quería, cuando se ve burlado por los Magos y José y María huyen a Egipto por la noche, la ira se apodera y manda matar a los niños. Estamos todavía con los festejos de la Navidad, en celebraciones, en fiestas y muchas veces nos encontramos con algunos Herodes o quizá a nosotros nos entre el “síndrome herodiano”; no me salen las cosas a mi manera, la vecina o comadre me cambió los planes, la otra familia brilla más que la mía, el marido o la esposa me sacan de mis casillas; la ira se apodera de nosotros y empieza la crítica, la maledicencia. El Papa Francisco dice “La maledicencia es un tipo de terrorismo”. Así es, con la crítica destruimos la fama de la persona. Una palabra dicha jamás la puedes borrar. No permitamos que Herodes gane, más bien que el amor del Niñito Dios y su paz sigan reinando en nuestros corazones y así podamos ser luz para todo quien nos rodea.
Propósito: si me viene algún pensamiento negativo de alguien, pensar tres cualidades de esa persona.