Lucas 17, 11-19
¿No ha vuelto más que este extranjero para dar gloria a Dios?.
Decíamos ayer que no tenemos nada que no hayamos recibido. Si eres exitoso en la vida es ciertamente por tu esfuerzo pero las cualidades y las oportunidades vienen de “Allá arriba”. Si estás viva hoy día y puedes disfrutar de una amanecer es por qué Alguien allá arriba está pensando en ti y te da aliento diariamente para poder disfrutar de la vida. En fin, tenemos tanto, pero tanto de que dar gracias a Dios, a la gente que me rodea, familia, amigos, escuela, pero se nos va la vida y se nos olvida decir de corazón esa palabra de siete letras: GRACIAS. Quizá la decimos de paso y sin sentirlo. La gratitud es la memoria del corazón; tomen papel y pluma, escriban (o escriban en su mente) por lo menos 20 cosas por las cuales dan gracias. Quedarán asombradas, no demos nada por hecho. Hagamos una pausa en la vida para decir, de corazón GRACIAS. La gratitud es la llave del corazón que lo abre a ser feliz, a gozar, a recibir gracias, a valorar, a disfrutar. No son las personas felices quienes son agradecidas, sino las personas agradecidas quienes son felices.
Propósito: que él gracias de hoy vaya acompañado de la actitud de agradecimiento. Que se note!