Martes 26 de octubre: Salir a sembrar y cosechar

Lucas 13, 18-21

Crece el grano, y se hace arbusto.

Este pasaje donde Cristo compara el Reino con un granito de mostaza me recuerda a la historia que nos contaban de niñas. “Había una vez un joven que caminaba por el centro, ve una tienda con un letrero, ‘se venden virtudes’, el joven muy ilusionado entra y le pide a la señorita, me da un kilo de paciencia, cien gramos de bondad, kilo y medio de caridad…. llega la dependienta y le regresa su saquito lleno de semillas, ‘aquí tiene joven ahora vaya plántenlas, cultívelas y pronto recogerá sus frutos”. Cristo hoy nos recuerda que las cosas de arriba, las que valen, las que duran, empiezan por una semillita, qué hay que cultivar, trabajar para que crezca como árbol frondoso que sirva para acoger y refugiar a muchos. No nos dejemos deslumbrar por lo grande, lo que brilla, sino por esos actos de la vida ordinaria, como lo son un buenos días, un mirar a los ojos, un gracias sentido, un saber escuchar…lo más pequeño es lo más grande que llega al corazón.

Propósito: hoy sonreír