3 DE MAYO: TÚ ERES MI CAMINO.

Juan 14, 6-14 “Yo soy el camino, la verdad y la vida”.

Jesucristo es el camino que nos lleva al Padre, es la verdad que debemos proclamar con alegría para dar fe de que lo reconocemos y es la promesa de vida eterna que venció la muerte en la cruz, perdonando nuestros errores y trayéndonos la esperanza de la salvación.

Cuando nosotros sentimos que tenemos las respuestas, es porque el Espíritu Santo ilumina nuestra mente con las palabras que Jesús nos ha enseñado. Nos acercamos a Él por medio de la oración, cuando comulgamos y recibimos el Cuerpo y la Sangre del Señor, en el rezo del Padre Nuestro, en el servicio a los demás y en el perdón.

Dios es nuestro camino hacia el bien, en Él hemos encontrado la gracia de la fe, hemos conocido a su Hijos Jesucristo, en Él nos convertimos en seres de amor. En la verdad de la Palabra de Dios, vencemos las tentaciones que nos comprometen y nos alejan de Él. Con la resurrección de Jesús, alcanzamos la vida eterna, como nos lo ha prometido.

Creer en Jesús, es amar a Dios y reconocerlo como el Creador de todo lo que somos, lo que vemos y lo que tenemos. Cultivemos nuestras virtudes, abracemos la caridad y la misericordia para dar testimonio de lo grande que es Jesús, del poder sanador de su palabra y del amor que derrama en nuestros corazones.

Propósito de hoy: Padre, ayúdame a proclamar tu verdad y a pedir perdón para alcanzar tu reino que es el camino, la verdad y la vida.