10 DE FEBRERO: ME CONCENTRO EN LA SOLUCIÓN.

Marcos 8, 1-10 “¿Cuántos panes tienen?”

Jesús no preguntó qué iban a hacer con tanta gente, unos 4 mil, según  nos dice Marcos en su Evangelio, cuando Jesús se preocupa por saber qué es lo que tenían en es momento para ofrecerles. Y me viene a la mente, el enigma de nuestra vida, cuando nos enfocamos más en los problemas, que en encontrar solución.

Hoy es s un buen día para analizar nuestra manera de pensar y de actuar, ¿Qué opinas?

Cuando tenemos algo que solucionar, que nos causa una molestia, o que nos es difícil de lidiar, nos metemos tanto en ese problema, que hacemos historias en nuestra mente de lo que va a pasar si no se acaba, o se termina, o si no lo eliminamos y a veces esa historia es más grande que la solución. Jesús nos enseña que lo importante es reconocer que existe un problema y sin pensarlo más, encontrar cómo resolverlo con lo que tenemos a nuestro alcance; Él no se detuvo a analizar de más lo que sucedía frente a sus ojos, se dió cuenta de que la gente no había comido durante 3 días por seguirlo y sabía que tenía 7 panes y unos cuantos pescados y ¡Manos a la obra! La gente comió y seguro estaban muy agradecidos por la bendición que recibieron de aquel a quién seguían y reconocían como el Hijo de Dios.

Y aunque parezca curioso, siempre que llega visita nos encontramos que hay suficiente de comer para todos ¿Te ha sucedido algo similar? Pues esto nos habla de amor y de caridad, y también de fe, porque nos damos cuenta que cuando hacemos el bien, todo se nos duplica. Hay un orden determinado para hacer las cosas en la verdad y la honestidad que hay en cada uno de nosotros y sin brincarnos los pasos del orden, encontraremos siempre una respuesta a nuestros conflictos. Algo así como gritarle a alguien porque no hizo las cosas a nuestra manera, antes de haberle explicado cómo hacerlas. ¿Verdad?

Quedémonos pues, con la palabra de Jesús que nos invita a saber ser asertivos al momento de tomar decisiones, a sabernos acompañados por Él y a tener fe que, en el amor de Dios, la carga no es tan pesada.

Propósito de hoy: Confío en ti Señor, para saber resolver mis conflictos con sabiduría.