15 DE NOVIEMBRE: ME DOY CUENTA DE TU AMOR INFINITO.

Lucas 17, 26-37 “Donde hay un cadáver, se juntan los buitres”.

El Evangelio de Lucas nos permite reflexionar en las palabras de Jesús a sus discípulos, o bien a nosotros. Nos habla del estado en el que nos encontramos como seres humanos.

Hasta que Noé se subió en el arca, los que quedaron se dieron cuenta que éste les habló de Dios y no quisieron creerle y lo que sucedió en Sodoma en el pueblo de Lot, que tampoco quisieron escucharlo y los que se quedaron quietos murieron calcinados. “Donde hay un cadáver, se juntan los buitres”.

¡No nos quedemos impávidos ante la buena nueva de Dios! Que su Palabra de vida eterna, tenga un significado en nuestra vida, en el día de hoy que nos preparamos para la eternidad. No tengamos oídos sordos, prestemos atención porque el mensaje de Dios es muy claro. ¡Quiere nuestra salvación!

Debemos hacernos visibles a los ojos de Dios, para que siempre pueda reconocernos, para que nuestra fe sea testimonio de que confiamos en que él nos ama, nos protege y quiere lo mejor para todos. Busquemos encontrar su verdad, seamos portadores de la verdad de Cristo, que no nos tome por sorpresa, estemos alertos, en la espera y que no nos suceda como a aquellos en los tiempos de Noé y de Lot.

Caminemos confiadamente en que el Señor guía nuestros pasos. No tengamos miedo a quedarnos con las manos vacías del amor de Dios, al contrario tenemos que repartir ese amor con aquellos que comparten el camino a nuestro lado. Busquemos alcanzar la felicidad en el servicio y en el perdón, reconociendo nuestra debilidad y recibiendo las gracias de Dios en nuestro camino.

Propósito de hoy: Gracias Padre, por tu amor,y por permitir que me de cuenta que al escuchar tu Palabra mi corazón se llena de tu amor infinito.