4 DE AGOSTO: TU AMOR ME HACE FUERTE.

Juan 6, 24-35 “¿Qué debemos hacer para realizar las obras de Dios?”

Qué bonito lo que nos dice Jesús en éste Evangelio de Juan y lo que debemos hacer para realizar las obras de Dios: “creer en aquel a quién él ha enviado”, y el enviado de Dios es Jesús mismo, como nos reafirma: “Yo soy el pan de la vida. El que viene a mí, no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed”.

¡Para realizar las obras de Dios hay que ser como Jesucristo! Empezando por aceptarlo como Hijo de Dios, como el Salvador y como ejemplo de amor para sus hermanos, que somos nosotros. Una vez que entendamos las cosas de Dios, por medio de Jesús, vamos a poder intentar imitarlo, dar testimonio de él con nuestras acciones y desarrollando nuestros dones para el servicio de los demás, para la convivencia respetuosa de unos entre otros.

Jesús ha venido  a dejar su vida por la nuestra, a cargar esa cruz injustamente para en ella, depositar nuestros pecados; Jesús se hace carne para que nos identIfiquemos con él y podamos darnos cuenta que, al igual que tú y que yo, él también lloró y sufrió, tanto como amó.

Jesús nos vino a enseñar el mandamiento nuevo del amor y quiere que nos amemos mutuamente de la manera en que él nos ama a nosotros. ¡Sí! Con la sencillez con que Dios nos hace sentir sus hijos predilectos y nos repite una y otra vez que cada uno tenemos dones que nos hacen diferentes, que nos permiten entregarnos al servicio amoroso de consolar al que sufre y de alimentar al que tiene hambre de Dios con nuestro ejemplo y testimonio de su amor.

Para realizar las obras de Dios y ser reconocidos con su amor, vamos buscando maneras diversas para expresarnos, para buscar la reconciliación con los demás; vamos extendiendo nuestra caridad hacia nuestros hermanos más necesitados, por medio de nuestra bondad y misericordia. Seamos testigos de Jesús, imitándolo principalmente en el perdón.

Propósito de hoy: Quiero estar siempre presente en tu vida Jesús, para poder imitar tus obras y hacer el bien a los demás, sabiendo que es tu amor, mi fortaleza.