23 DE JUNIO: RECONOZCO MIS TESOROS.

Mateo 6, 19-23 “ Donde está tu tesoro, ahí está también tu corazón.”

Ya hemos escuchado esta frase en muchas ocasiones y no se, es la primera vez que le voy a poner atención; en realidad no sabía que venía de algún Evangelio, ¿Y tú, lo sabías?

Y ¿en donde está nuestro tesoro?

“Tus ojos son la luz de tu cuerpo”, también nos dice este evangelio. Si tus ojos ven con los ojos de Dios, entonces están sanos porque solo van a buscar lo bueno, hacer las cosas bien y con mucho amor, procurando que los demás sientan que tienen un valor para ti, en tu corazón.

Hay una relación entre la vista y los tesoros…y la ambición. Ves una auto bonito, lujoso y caro, que puede darte un lugar en la sociedad a la vista de tus amigos y familiares y lo quieres comprar; no importa si tus hijos no tiene una mejor educación por que lo que importa en ese momento para ti, es que te vean y crean que tu situación económica es excelente como para darte ciertos lujos y conviertes el auto en tu tesoro. Por ahí se empieza esto de acumular tesoros en la tierra y descuidar los tesoros que más valen, como el amor a ese hijo que está sacrificando su educación por tu elección de un auto lujoso y nuevo. Vamos, no es que sea malo, pero no es buenos que lo que te sobre sea tu limosna para lo importante.

Mucho tendrá que ver la perspectiva de las prioridades de cada quién. Tu tesoro está en ti, en lo que lleva cargando tu corazón; tal vez pueda ser el dolor por alguien que perdiste y su recuerdo es tu tesoro, o a lo mejor el amor incondicional que sientes hacia tu familia, o tu esposa o tus hijos, o tal vez a tus padres, y es ahí donde está en realidad tu tesoro. En lo que sabes compartir con los demás, en la distribución de tus bienes utilizados para el beneficio de alguien mas aparte de ti.

Que tu tesoro sean tus cualidades y tus virtudes y que puedas tratar los dones que recibiste de Dios como algo mas valioso que una auto de lujo, cuando el auto es solo un vehículo de utilidad que no se mueve por si solo, y tu corazón en cambio está en constante movimiento que se motiva por el  milagro de la vida que hace en ti Jesucristo cada mañana.  Deja que tus tesoros sean los que ves dentro de tu corazón y que te ayudan también a reconocer los tesoros de amor en los demás.

Propósito de hoy: Ver a mi alrededor y darme cuenta cuales son mis verdaderos tesoros.