Marcos 12, 28-34 “¿Cuál es el primero de todos los mandamientos?”
Si alguien te hace esta pregunta ¿Sabrías responder?
El primero de los mandamientos es el amor, amor a Dios; el segundo es el amor, amor al prójimo y el Mandamiento Nuevo que es el más importante de todos es también el amor; porque “El amor es la plenitud de la ley”, nos dice la carta a los Romanos.
¡No tengas miedo de amar!
El Catecismo de la Iglesia Católica es un gran libro que me encanta, porque nos ofrece una explicación detallada de manera sencilla sobre los Mandamientos de la Ley de Dios. Suena algo como muy jurídico ¿Verdad? Pero no es así. Es en verdad un gran libro de valores que es muy útil repasar hoy día donde los valores morales escasean. Muchas veces creemos que aquellos que no tienen o no respetan los valores civiles y de amor es porque los padres no supieron enseñarles bien. Si este es tu caso, no te castigues pensando que no hiciste un buen trabajo con tus hijos. La sociedad de hoy es muy propensa a hacer la voluntad propia sin importar si de paso se llevan a los demás; y muchas veces nada tiene que ver contigo como padre.
¡Que en tu vida no falte el amor! Juan nos habla de este Mandamiento Nuevo, “Ámense los unos a otros, como yo los he amado. Así, ámense los unos a los otros.” Y es en esta enseñanza que aprendemos a perdonar, a ser generosos, a servir a los demás con dignidad como quisiéramos que alguien nos quisiera y nos tratara también a nosotros. En la vida todo tiene ida y tiene regreso. En la capacidad que tratamos bien a los demás es muy probable que regrese a nosotros con bendiciones y gracias, porque en el amor que damos seremos reconocidos.
Cuando le permitimos a Dios entrar a nuestra vida, cuando atesoramos su Palabra de Vida Eterna y actual, y cuando dejamos que nos ame con nuestros defectos y nuestras virtudes, es cuando podemos sentirnos como seres humanos de amor. Ya que es por amor que nos reconciliamos con los demás, por amor perdonamos y es en la reconciliación y el perdón que logramos llenarnos de una hermosa paz, congruente con lo que sentimos y digna de cada uno.
Propósito de hoy: Acercarnos a las personas que nos aman con un mensajito de agradecimiento.