17 DE ENERO: IMITO TUS ACCIONES .

Marcos 2,23-28 “¿Por qué hacen tus discípulos algo que no está permitido hacer en sábado?” 

Hacer el bien a los demás no debería tener fecha de caducidad; `es hoy, porque mañana es sábado o domingo´. No, hacer el bien debe ser tarea de todos los días. Cuando somos pequeños, nuestros padres deseaban que estuviéramos bañados y arreglados siempre, no solo el día que nos llevarían a una fiesta. La vida es igual. Debemos procurar las buenas acciones de servicio hacia los demás en cada oportunidad que tengamos. 

La voluntad de Dios es siempre la misma. Quiere que aprendamos de su Hijo Jesucristo a entregarnos por los demás, porque en esa entrega estamos reconociendo y siendo testigos del amor más grande que hayamos recibido en la vida, de ese amor incondicional que no se echa para atrás…el amor de Jesús. 

Te has puesto a pensar ¿cuántas veces al día puedes compartir tu amor con los demás? Vamos haciendo un ejercicio; toma una hoja y anota desde mañana, cuantas veces dices “por favor”, cuantas veces dices “gracias”, cuantas veces dices “¿te ayudo?” y cada vez que digas alguna de estas palabras, anótalos en tu hojita. Al final del día, lee tu hoja y pregúntate: ¿Tuve en el día más oportunidades de decir esas palabras a los demás? Es como hacerte consciente de la manera en que vives tu vida; de darte cuenta si solo pasas por ella sin hacer una diferencia en los demás, o si en realidad tienes un gran corazón de servicio que utilizas siempre con sinceridad y con ese amor que tienes para compartir. Cuando pensamos lo difícil que es ser honestos con lo que sentimos, solo debemos tener claro todo lo que vivió Jesucristo y, aun así, dio su vida al servicio de los demás; sanó el corazón de muchos, curó enfermos, perdonó a tantos y amo mucho. No importaba si era lunes o sábado, Él hizo milagros y maravillas para que hoy día, supiéramos que la caridad, la bondad y la misericordia de su corazón no tenía fecha de vencimiento.  Aprendamos a amar como Jesús, compartiendo lo que hay en nuestro corazón en la verdad, con honestidad y sinceridad, sin pasar de lado que el respeto a uno mismo va de la mano con la entrega en el servicio que estamos dispuestos a dar con dignidad y amor. 

Propósito de hoy: Aprender a darnos cuenta de nosotros mismos en el servicio que damos a otros.