Lucas 1, 67-79 “Para guiar nuestros pasos por el camino de la paz”
Porque Él es LA LUZ DEL MUNDO, y con su luz viene a guiar nuestro camino hacia la paz. La paz en nuestros corazones, en nuestra familia, con nuestros amigos. Estamos en la temporada de la esperanza, de la buena nueva, de la venida de Cristo; estamos en el momento del perdón.
Esperar el nacimiento de un bebé, tal vez nuestro hijo o nuestro nieto, o una sobrina, o el hijo de nuestra amiga, o de la amiga de la amiga o de la chica que vimos en la clínica; siempre es momento de sonreír, de alegrar el corazón, de sentir que llega una vida que nos va a recargar de energía, de esperanza, que nos llena de ilusión. ¡Que hermoso recibir a un bebé y tenerlo en brazos! ¿Te ha pasado? ¿Has tenido esa dicha? Imaginemos por un momento ese sentimiento de armonía en el hogar y pensemos en José y María; viajando en el desierto desde Nazaret hasta Belén, sobre un burrito. Tal vez pasaron frio, o incomodidades ante las inclemencias del clima, pero iban felices por la llegada del Salvador.
Cuando hablamos de armonía, hablamos de perdón, pero de un perdón genuino; no del perdón que cuando te ven en sociedad, te tratan como si fueras el mejor amigo, y cuando están a solas te siguen criticando y juzgando; y peor cuando están frente a frente son groseros contigo. ¡Ese perdón tan falso ni Dios lo perdona! Que no caigas en ese perdón hipócrita, no vale la pena. Es más bonito y eres más grande cuando de verdad ofreces un perdón desde el corazón y estamos en ese tiempo de perdonar, de querer para los demás lo que quieres para ti mismo.
Tengamos un momento de meditación, y pensemos en el dolor que hemos causado al otro, en lo duros que hemos sido, en ese resentimiento hacia nuestros hermanos. Sentémonos y hagamos una pausa para analizar nuestro comportamiento, y aprender a pedir perdón para reconciliarnos con aquellos que lastimamos y que nos han lastimado. Que la luz de Jesús guíe nuestro camino para perdonar y podamos juntos alcanzar la paz del corazón, hoy que nos ha nacido el Salvador.
Propósito de hoy: Vamos a pedir perdón para llegar a la Navidad con un corazón en paz.