Viernes 9 de julio: Serpientes y palomas

Mateo 10, 16-23

Astutos y precavidos cómo las serpientes sencillos como las palomas.

Toda la semana hemos hablado del pastor, de las ovejas, del espíritu misionero, hoy Cristo nos quiere dar dos consejos muy prácticos. Que vayamos por el mundo, sí, siendo Pastores que guían, dirigen, enseñan, invitan, a veces acarrean; que seamos esos agentes de cambio , que con el testimonio curen leprosos y enfermos, resuciten muertos, saquen demonios; que seamos misioneros, enviados, testigos de su amor. Pero que lo hagamos bajo dos actitudes: la astucia y la sencillez. Es decir no “soltar el catecismo / la cátedra de golpe” sino con astucia, una palabra por aquí, una acción por allá, una actividad atractiva, es decir jugar la bola en su cancha. Y sencillos, sin aires de superioridad y grandeza, sin alardes de perfección. Sencillos, humildes, sin hacer ruido, como la paloma blanca que evoca paz, dulzura, sencillez, amabilidad, bondad.

Propósito: hoy ser audaz y sencilla.